La adopción el miércoles de esta declaración corona los trabajos de la reunión de alto nivel celebrada durante la semana de alto nivel de la 78a sesion de la Asamblea General de las Naciones Unidas, presidida por el Embajador y Representante Permanente de Marruecos ante las Naciones Unidas, Omar Hilale, en su calidad de cofacilitador de este importante proceso de las Naciones Unidas.
Hilale pasó un año cofacilitando este proceso intergubernamental, que culminó con la finalización de este documento de referencia de la ONU. Así, la adopción de esta declaración histórica testimonia la credibilidad, la confianza y el respeto de que goza el Reino de Marruecos en la ONU y a nivel internacional, bajo el liderazgo de Su Majestad el Rey Mohammed VI.
Es también un reconocimiento del papel de Marruecos como actor activo y comprometido, capaz de configurar la acción mundial para preparar, prevenir, detectar y responder a posibles emergencias sanitarias de forma colectiva y rápida.
La designación de Marruecos por la ONU para liderar este proceso de facilitación es un fuerte respaldo a la estrategia vanguardista y preventiva puesta en marcha bajo el liderazgo clarividente del Soberano, desde el inicio de la pandemia COVID-19. La gestión, la vigilancia y la respuesta de Marruecos a la COVID-19 han sido elogiadas y citadas como ejemplo en numerosas ocasiones por la comunidad internacional.
En sus discursos de apertura, el presidente de la Asamblea General, Dennis Francis, y el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, rindieron homenaje al importante papel de Hilale en la facilitación del primer proceso de las Naciones Unidas para negociar la declaración política que coronó la reunión de alto nivel de la Asamblea General sobre prevención, preparación y respuesta ante pandemias.
Esta importante declaración, la primera de este tipo, tiene como principal objetivo movilizar la voluntad política a escala nacional, regional e internacional para la prevención, preparación y respuesta ante las pandemias, y contribuirá al proceso mundial, actualmente dirigido por la OMS, para elaborar una convención o instrumento jurídico internacional sobre el tema, en virtud de la Constitución de la OMS.
Esta Declaración de la máxima importancia proporciona las herramientas necesarias y los conocimientos basados en pruebas para que la comunidad internacional esté mejor preparada para futuras pandemias, sobre todo en lo que respecta a los sistemas sanitarios, las economías, las cadenas de suministro, los mercados laborales, la confianza pública y la estabilidad social y política.
