Casablanca-Settat encabeza la lista con el 31,4% de la riqueza nacional, por delante de Rabat-Salé-Kenitra (16,1%) y Tánger-Tetuán-Alhucemas (10,4%), indica el HCP en una nota informativa sobre las cuentas regionales para 2022.
La nota también revela que cinco regiones generaron el 33,5% del Producto Interior Bruto (PIB). Se trata de Marrakech-Safi (8,3%), Fez-Mequínez (7,9%), Souss-Massa (6,6%), Beni Mellal-Jenifra (6,1%) y la región Oriental (5,1%).
La región de Drâa-Tafilalet y las tres regiones del Sur contribuyeron en un 7,9% a la creación del PIB en valor.
En este contexto, las disparidades en la creación de riqueza entre las regiones se han acentuado, señala el HCP, precisando que la brecha media absoluta (la media de las brechas absolutas entre el PIB de las distintas regiones y el PIB medio regional) ha pasado de 72 mil millones de dírhams (MMDH) en 2021 a 73,1 MMDH en 2022.
Además, las cuentas regionales de 2022 muestran disparidades en las tasas de crecimiento del PIB en volumen entre las regiones con respecto a 2021.
En efecto, cuatro regiones pudieron registrar tasas de crecimiento superiores a la media nacional (1,5%). Se trata de Suss-Massa (7,5%), Rabat-Salé-Kenitra (5,2%), Marrakech-Safi (4,6%) y Laayún-Sakia El Hamra (2,9%).
El HCP señala también que seis regiones registraron tasas de crecimiento positivas inferiores a la media nacional, que van del 1,3% en Gulmim-Ued Nun y Drâa-Tafilalet al 0,2% en Casablanca-Settat.
Por el contrario, las regiones de Beni Mellal-Jenifra y Fez-Mequínez registraron un crecimiento negativo del 4,7% y el 1,9%, respectivamente.
En 2022, la economía nacional registró un PIB en volumen de 1.296 MMDH, con un crecimiento del 1,5% con respecto a 2021. A precios corrientes, el PIB alcanzó los 1.330,5 MMDH, con un aumento del 4,2%.
