En la región montañosa de Chefchauen, estos niños pudieron disfrutar de la belleza del paisaje natural que ofrece la región, así como maravillarse con el emblemático color azul de las callejuelas entrelazadas de la ciudad, deteniéndose ante su fortaleza histórica, la plaza Outa Hammam y otros lugares de interés turístico.
Los niños también fueron recibidos por el gobernador de la provincia de Chefchouen, Mohamed Alami Ouaddane, en un ambiente de solidaridad, simpatía y fraternidad compartido por los dos pueblos, marroquí y palestino.
Al término de este encuentro, los niños de Al-Quds expresaron su agradecimiento a SM el Rey Mohammed VI, Presidente del Comité Al-Quds, que cada año permite a los niños de la ciudad santa visitar Marruecos y disfrutar de la diversidad de su territorio, de la belleza de su naturaleza y de la generosidad de su pueblo.
