Marcando el inicio de una nueva era para la industria del cannabis en Marruecos, esta apertura, que parte de la aplicación de la ley 13-21 sobre los usos legales del cannabis, promete traer cambios significativos, en particular con la creación de puestos de trabajo y el desarrollo de un sector de alto valor añadido, destinado a mejorar la economía local y promover una industria más responsable.
En una declaración a la prensa, el Guerrouj subrayó que la puesta en marcha efectiva de las operaciones de esta primera planta de procesamiento abrirá nuevas perspectivas para la economía local.
«Gracias a los esfuerzos conjuntos del Gobierno y de la ANRAC, se dan todas las condiciones para que esta nueva industria se ponga en marcha con éxito», declaró.
Asimismo, señaló que una de las prioridades de este lanzamiento es apoyar a los inversores y a los agricultores, señalando que «esta iniciativa permitirá a un número creciente de actores locales beneficiarse de las oportunidades que ofrece este nuevo sector legal».
Por otra parte, el director general de la ANRAC señaló que la agencia también había puesto en marcha un riguroso programa de control para garantizar el cumplimiento de las normas y reglamentos.
Según él, «este programa, cuyo objetivo es promover una industria responsable y de calidad, será evaluado periódicamente para garantizar su eficacia y su adecuación a la evolución del sector».
