«Marruecos tiene algo que Argentina no tiene, que es la experiencia en desalinización», afirmó el experto argentino, destacando el programa para construir 20 estaciones desaladoras hasta 2030, incluida la de Casablanca, que está a la vanguardia en tamaño y tecnología utilizada.
Meschengieser también destacó el objetivo fijado por Marruecos de producir, gracias a estas estaciones desaladoras, alrededor de 1,7 mil millones de metros cúbicos de agua al año, subrayando la relevancia del Programa Nacional de Abastecimiento de agua Potable y de Riego 2020-2027.
“Yo creo que Argentina y Marruecos tienen un potencial enorme para trabajar en conjunto” en este ámbito, afirmó el presidente de la CAA, que agrupa a todas las empresas del sector de agua y saneamiento de Argentina.
El experto argentino destacó también la contribución de Marruecos en el ámbito de la diplomacia del agua, señalando que el Reino podría aportar su experiencia «en materia de desalinización por ósmosis inversa y, especialmente, en el uso de energías renovables, porque en Argentina el problema de la desalinización se enfrenta al alto costo de la energía.
Refiriéndose a la experiencia de su país en la gestión de cuencas hídricas y la confección de planes directores de agua, Meschengieser afirmó que los dos países «tienen mucho que aportar el uno al otro» en términos de gestión del agua.
