Para el responsable de este centro de investigación, con sede en París, la política exterior del Reino, centrada en particular en el refuerzo de la cooperación Sur-Sur, atestigua el compromiso del Soberano con el desarrollo socioeconómico del continente.
Este papel de líder regional se ha visto reforzado por el regreso de Marruecos a la Unión Africana en 2017, como actor clave de la cooperación interafricana en términos de desarrollo, estabilidad y seguridad para los países del continente, escribe el geopolitólogo en el boletín del OGE del martes.
Refiriéndose al impulso creado por el apoyo de numerosos países al plan de autonomía para el Sáhara marroquí, Hamadé afirmó que este creciente impulso «subraya la importancia estratégica del Reino para la seguridad y la prosperidad del continente africano, en un contexto internacional cada vez más incierto».
Tras recordar el apoyo de Francia a la soberanía del Reino sobre su Sáhara, expresado al más alto nivel del Estado, el director ejecutivo del OGE señaló que «este reciente desarrollo marca un paso decisivo hacia la resolución del conflicto artificial que rodea al Sáhara marroquí, en línea con las legítimas aspiraciones de las poblaciones locales y los requisitos de la estabilidad regional».
Añadió que un mayor apoyo internacional al plan de autonomía para el Sáhara marroquí, junto con una asociación reforzada con actores clave como Francia, podría allanar el camino hacia una resolución política duradera de este conflicto regional artificial.
